martes, 6 de julio de 2010

Análisis de la Obra.


En este poema de Octavio Paz, se distinguen variadas metaforas que van incluyendo a personas, paisajes y frutos, lo que nos hace sentir que nuestros sentimientos se encuentran volando, y en el cual le podemos dar variados significados, por ejemplo, en el caso de las nubes, nos expresa la nostagia del invierno en el cual nustros sentimientos aflojan.
Además podemos rescatar que es una gran obra que esta inspirada en la naturaleza y en lo abstracto que tiene nuestra vida.

El arbol quieto entre la nubes


Aquel joven soldado era sonriente y tímido y erguido como un joven durazno. El vello de su rostro se doraba con el rubor de los duraznos al amarillo sol de mediodía. Sus ademanes eran como los ademanes del durazno cuando el viento lo mueve, en la colina. Si sonreía era su sonrisa un imprevisto florecer durazno. Una ráfaga a veces lo nublaba y entonces, serio, ensimismado, era un durazno al aire, deshojado.



Jugaba con los niños, en la tarde, con un fervor nostálgico, lejano, con la misma ternura de la ola que se aleja volviendo la cabeza. Un viento melancólico barría nubes en flor, apenas nubes, y en el jardín volaban hojas ¡oh despeinada primavera! Árbol quieto entre nubes, hojas, niños, se preguntaba aquel soldado: ¿Es nube todo, todo es hoja, viento? ¿Los familiares árboles son nubes? ¿Esta rama que toco, esta corteza, estos niños, son nubes? ¿Nube el sueño y la muchacha aquella y su perfume, fantasma de la carne, nube, espuma apenas sostenida por el viento?


Y se alejó, callada nube negra.

domingo, 27 de junio de 2010

Octavio Paz


Poeta y escritor Mexicano (1914-1998), premio Nobel de Literatura (1990), es uno de los grandes poetas Hispanos de todos los tiempos. Su obra abarca varios géneros, pero sobresalen los poéticos, ademas el ensayo y traducciones.

Su obra poética pretende "Liberar a la palbra de reglas o propósitos utilitarios" para devolverle su esencia mágica, haciendo uso casi exclusivo del pensamiento y de una rima interna y sutil, algunas veces difil de captar.
Entre sus obras poéticas destacan: El árbol, quieto entre las nubes, Bajo tu clara sombra, Como quien oye llover, contra la noche sin cuerpo, entre otros.



domingo, 23 de mayo de 2010

Modernidad Centro - Periferia.


La dualidad centro-periferia es un modelo de organización territorial de ciertos sistemas económico-políticos que ocupa un lugar central en la escuela económica desarrollistas o estructuralista, también conocida como teoría de la dependencia, creada poco después de la segunda gerra mundial. Según el desarrollismo la dualidad centro-periferia está directamente relacionada con la dualidad industria - agricultura y su distribución mundial de acuerdo a determinados sistemas de division internacional del trabajo.
El término centro-periferia ha sido particularmente exitoso para referirse a las desigualdades sociales y económicas
y su desigual distribución espacial, especialmente en el ámbito mundial, hablándose en este sentido de países centrales y países periféricos, con significado similar a otras dualidades de uso habitual, como Norte - Sur, mundo desarrollado-subdesarrollado y primer mundo - tercer mundo.

José Joaquín Bruner analizó los fenómenos de desarrollo, difusión y recepción de la modernidad dentro de la dialéctica centro - periferia. Enfoca la modernidad como época histórica, entramado institucional, experiencia vital y un complejo juego de discursos. El estudio conduce a replantear el debate sobre la modernidad en la cultura de América Latina y examina las diversas y contradictorias visiones que al respecto se han formu­lado.

viernes, 14 de mayo de 2010

Imperativo Categorico de Kant


También puede ser llamado como Imperativo Apodíctico, mandato con carácter universal y necesario, preescribe una acción como buena de forma incondicionada, manda algo por la propia bondad de la acción, independientemente de lo que con ella se pueda conseguir. Declara la acción objetivamente necesaria en sí, sin referencia a ningún propósito extrínseco. Kant considera este tipo de Impoerativo que es propiamente un Imperativo de la Modernidad.

Los imperativos categóricos tienen la forma general "debes hacer X", o, en su versión prohibitiva, "no debes hacer X"; "debes ser veraz", "no debes robar", son ejemplos de imperativos categóricos. De todas formas es preciso tener cuidado porque la mera expresión lingüística no es suficiente para determinar si el imperativo que ha guiado nuestra conducta es hipotético o categórico: para averiguar si es uno u otro el caso es preciso referirse a lo que ha movido nuestra voluntad: si no hemos robado, nuestra conducta es conforme al deber (conforme al imperativo “no debes robar”), pero si no hemos robado por miedo a la policía, el imperativo que hemos seguido es hipotético (“no debes robar si no quieres tener problemas con la policía”); sin embargo, si no hemos robado porque la acción de robar es mala en sí misma, independientemente de si nos pueda detener o no la policía, entonces nuestro imperativo es categórico. Kant consideró que nunca se puede estar absolutamente seguro de que nuestra conducta no haya estado motivada por un interés o por algún temor, y por ello concluyó que cuando nos parece seguir un imperativo categórico siempre es posible que el imperativo por el que nos regimos sea hipotético.

Kant


Imanuel Kant, filósofo alemán, es considerado uno de los filósofos más importantes de Europa moderna, del último peridodo de la Ilustración y de la filosofia universal.

Confio solamente en la razón, no pensó que ella sóla pueda despegarse del mundo empírico y de sus altos vuelos planear sobre la región de lo metafísico (el "sueño dogmatico" que criticó), pero sí que penetrando a la sensibilidad y en arminía con ella era capaz de ofrecernos conocimientos plenos y verdaderos. A la vez esta misma Razón puede llamarnos desde lo más intimo de nuestro ser e incitarnos a la vida buena, en un mandato del bien que nada en el mundo puede quebrar.

Pero ambas tareas, el conocimiento y la vida moral, necesitan del cuidado de una instancia que las regule, evite sus pretensiones infundadas o las confusiones en cuanto a sus resortes legítimos; curiosamente, para Kant esta instancia o tribunal al que debemos acudir es también la propia Razón. Junto con ello, tenemos en Kant la fascinación por una idea del mundo empírico y natural triunfante, la que ofrece el sistema de Newton, con la que nos arriesgamos a tratar todo como mera cosa, incluidos los hombres, perdiendo lo propio del mundo moral, la libertad y la dignidad de la decisión ética. La empresa filosófica de Kant es temeraria: mostrar que ambos mundos pueden conciliarse y que están presentes en la vida humana.

Algunas de sus obras son: Critica de la Razón Pura, Metafísica de las Costumbres, entre otras.